El pasado sábado día 13 se celebró en Susinos una fiesta dedicada a los mayores del pueblo. Entre los homenajeados estaba Mercedes : “la de Carlos, la de la entrada… mi cuñada.” Mercedes goza del privilegio de ser hija de pleno derecho tanto de Villorejo como de Susinos.
Nació y vivió en Susinos hasta que se casó con Carlos, un mozo de Villorejo. Y desde entonces su vida estuvo repartida entre los dos pueblos. Aunque ahora está más afincada en Villorejo, nunca dejó de sentirse “mosquita”.
La fiesta empezó con una Misa muy emotiva en la que los familiares de los homenajeados participaron en las ofrendas, las peticiones y las lecturas. Al acabar la Misa se les hizo entrega de un pañuelo personalizado con su nombre y el emblema del pueblo. Ese era el momento en que cada familiar decía unas palabras en su honor. En este caso fue su hija Elena quien destacó de su madre esa fidelidad a su pueblo de origen sin por ello sentirse forastera en Villorejo. También destacó que el hecho de perder a su padre siendo muy pequeña, forjó ese carácter fuerte y valiente que tanto la caracteriza. Siempre ha hecho alarde de una gran fortaleza para superar los obstáculos que la vida ha ido poniendo en su camino. Agradecemos este homenaje que le ofrecéis porque nos sirve para esforzarnos en recordar una vida completa resumida ahora en unas líneas. Me gustaría recordar aquí unas palabras de la periodista y escritora Maruja Torres que siendo ella una mujer de edad decía: “Hay que ser más valiente para ser viejo que para ir a la guerra; porque el que va a la guerra tiene esperanza de sobrevivir, el viejo ya sabe que no,” Sirva este homenaje para reforzar esa valentía.
La ceremonia estuvo amenizada por el grupo de danzas Virgen de las Aguas de Tardajos. Se completo el día con una paella popular en el frontón. Por la tarde Tuta música y fotocol en la Bolera y por la noche baile.
Ha sido un acto bien organizado de reconocimiento en vida y de rencuentro.
Fotografías: Juan Calzada