A continuación tenéis una carta que los hijos y la mujer de Valentín leyeron en el funeral.
VALENTÍN SALIÓ MUY JOVÉN DE SU PUEBLO VILLOREJO. EN LA MALETA, ADEMÁS DE LOS RECUERDOS VIVIDOS Y DE LOS SUEÑOS QUE ANSIABA ALCANZAR, NO SE OLVIDÓ DE METER EL LEMA DE SU PUEBLO “LA PEÑA DE LOS CANGREJOS”.
ÉL QUERÍA Y SABÍA QUE IBA A CONSEGUIR SU PROPIA PEÑA Y POR ESO JUNTO CON SU MUJER ANGELITA Y EL AMOR QUE LES UNÍA FORMARON SU PROPIA PEÑA, SUS 3 HIJOS: AMAIA, IÑIGO, ESTÍBALIZ.
A VALENTÍN Y ANGELITA DEBEMOS LO QUE AHORA SOMOS: PERSONAS CON GANAS DE VIVIR, CON GANAS DE LUCHAR, COMPROMETIDAS CON LOS DEMÁS, TRABAJADORAS, PREOCUPADAS POR EL OTRO, PERO SOBRE TODO NOS HAN ENSEÑADO EL VALOR DE LA FAMILIA, DEL ACOMPAÑAMIENTO, LA UNIÓN DE HIJOS CON PADRES, PADRES CON HIJOS, LA UNIÓN CON NUESTROS SOBRINOS, PAREJAS, PRIMOS, TIOS, ABUELOS.
HASTA EL ÚLTIMO MOMENTO DE LA VIDA DE NUESTRO AITA ESTUVO ACOMPAÑADO, ES LO QUE ÉL QUERÍA Y ASÍ LO HEMOS HECHO, HA ESTADO ACOMPAÑADO DE SU MUJER, HIJOS, NIETOS: ENEKO Y EKAI, DE SU NUERA Y YERNOS, DE SUS HERMANOS, CUÑADOS, SOBRINOS, PRIMOS Y CONOCIDOS.
AITA, NOS HAS DEJADO UNA IMPORTANTE RESPONSABILIDAD, SEGUIR CON TU LEGADO, SEGUIR CON ESA PEÑA QUE TÚ COMENZASTE Y QUE AHORA HAS DEJADO EN NUESTRAS MANOS. LO HAREMOS COMO TÚ NOS ENSEÑASTE: CON TESÓN, CON RESPONSABILIDAD Y CON AMOR.
GRACIAS AITA, SABEMOS QUE ESTÁS Y ESTARÁS ORGULLOSO DE NOSOTROS Y QUE NOS CUIDARÁS EN TODO MOMENTO.
SABEMOS QUE ESTÁS CON LOS TUYOS Y QUE TE RECIBIRÁN CON LOS BRAZOS ABIERTOS.
